Día 12 de setiembre de 1809.

Santoral: noticias de Sevilla del 27 de Agosto y de Paris del 29 conteniendo la comunicación del general Verdier dando cuenta de la toma de Montjuich con varias notas de la redacción del Diario, las cuales tenemos ya publicadas.

Sucesos del sitio.

El enemigo trabajó toda la noche en la trinchera, apesar del vivo y continuado fuego de fusil que se le hizo desde la muralla y de las descargas de metralla acompañadas de algunas bombas y granadas de nuestras baterías que les causaron mucho daño.

El teniente del segundo de Barcelona D. José Camps, dio parte de que habiendo observado la posicion y fuerza del enemigo en la parte de San Daniel, halló ser la misma que en estos días, notando que durante la noche andaba sin cesar una escucha enemiga hasta acercarse á medio tiro de fusil de las avanzadas del dicho partedante. La fuerza existente en el monasterio de San Daniel era bastante crecida, según lo indicaban los muchos centinelas que se divisaban por sus cercanías y la circunstancia de salir de dicho monasterio todas las avanzadas.

Una bomba que cayó en medio de los trabajos del enemigo, hubo de causarle mucho daño á juzgar por los grandes lamentos que se oían.

Al amanecer se notó que había reparado la batería del olivar y que más debajo de ella, en la unión de los dos caminos, había construido un grueso espaldón, formado con gaviones. Esta obra indicó que era una batería situada casi al cubierto de los tiros de la artillería del fuerte de Condestable y del reducto del Cabildo.

Las baterías de Manegat y de la muralla de San Cristóbal hicieron un fuego muy vivo y acertado sobre este nuevo trabajo, consiguiendo destruirlo en parte.

El fuego de las baterías enemigas fue en todo el día muy lento.

Por la tarde desfiló una columna enemiga por la parte del camino de Barcelona en número de 1000 infantes y 110 caballos. Pasó el Ter por Salt y se apostó en el bosque de Tayalá quedando la caballería en el raso inmediato.

Por los partes del Comandante de tiradores del campanario de la Catedral, se supo que el enemigo había construido tres troneras en el ramal del valle á la derecha del camino de Montjuich. También se observó que trabajaba en la batería baja del Puig den Roca, en la que se descubrió una pieza al parecer obús. Perfeccionó también el enemigo las dos troneras de la izquierda del camino de Montjuich, teniendo puestos en batería los dos cañones. Igualmente construyó un nuevo ramal á la misma izquierda aproximándose á la muralla.

En la Plaza se continuaron los mismos trabajos.

Como el enemigo podía acercarse con sus obras de ataque á la puerta de San Pedro, que se había cerrado con un grueso muro, después de la pérdida del castillo de Montjuich, se acordó cortar la plazuela existente detrás de dicha puerta, con un buen retrincheramiento, apoyando sus flancos á las paredes del monasterio de San Pedro de Galligans, y á la parte posterior del ábside de la antigua iglesia de San Nicolás, dentro la cual se habían construido los hornos para el pan de la tropa.

Esta obra y la cortadura de la plaza de San Pedro inmediata á la puerta de Francia, se consideraron suficientes para detener á los enemigos, en el caso de que consiguieran vencer las otras obras de defensa de la brecha de Santa Lucía, ó que lograran abrir la puerta de San Pedro ya fuese por medio de hornillos, ya con alguna batería que colocase en la montaña de Montjuich.

En este mismo día se dio principio á la construcción del citado retrincheramiento, á cuyo fin se abrió un foso que debía tener 36 pies de largo, 12 de ancho en la parte superior y 9 de profundidad. Se empezó además á formar el parapeto de 9 pies de alto, con su banqueta y una tronera para un cañón de á 4, haciéndose á su espalda un emplazamiento para un mortero de 10 pulgadas.

Se publicaron los siguientes documentos oficiales.

"Aviso al público.

"Por el diario de antes de ayer se habrán enterado los vecinos de esta ciudad de los paternales cuidados que la suprema junta central del Reyno toma por el pronto y poderoso socorro de una plaza que ha acreditado hasta el grado más heroico su amor á la patria. Los seis millones de reales vellon embarcados en el navio Algeciras, que llegaron á Tarragona el día 4 del corriente: los dos más, destinados al mismo objeto; y todo el oro disponible que existia en la tesoreria mayor, y que traxo consigo á la de dicha ciudad el conductor de la benéfica resolucion de S. M. arriba expresada, son una garantía demasiado sólida para todas las personas que quieran entregar dinero en esta pagaduria del Ministerio de la Real hacienda y guerra de mi cargo, recogiendo libranzas á la vista contra la tesoreria del exército en Tarragona. En esto harán un acto de los más patrióticos, sin menoscabo alguno de sus intereses, pues deben tener entendido para su mayor seguridad, que aun antes de haberse verificado la llegada de estos caudales á aquella tesoreria, ha aceptado y mandado pagar inmediatamente el señor intendente de este exército, según me avisa de oficio, las libranzas que le he ido remitiendo.

"No deben detenerse (en facilitar por este medio los más eficaces para consumar la heroica defensa, que hasta ahora con tanto ardor han sostenido) en que las cantidades que me presenten sean pequeñas, pues los servicios hechos a favor de la patria siempre son grandes, y no se miden por su tamaño, sinó con relación á las proporciones y buen deseo del que los presta. Los muchos y continuados que con la mejor voluntad y el ardoroso patriotismo, han hecho á porfia todos los habitantes de esta benemérita ciudad, desde el momento en que principió esta honrosa lucha, dan motivo suficiente á esperar que estando ya tan próximo el de su libertad, se apresuraran á contribuir por su parte y por este medio á conseguirlo.

"Gerona 12 Septiembre de 1809.-- Carlos Beramendi".

"Bando.-- La proximidad de nuestros exércitos, sus movimientos y aun los extraordinarios que se observan en los del enemigo, y sobre todo la Real Orden de S. M. la suprema junta del Reyno, para que sea socorrida y libertada esta importante plaza á toda costa, que se publicó en el diariod de ayer, nos confirman en la esperanza, de que se apresura nuestra deseada y suspirada libertad, y en el corto plazo que se dilata, la Religion, el Rey y la Patria, exigen de nosotros los últimos, aunque más penosos sacrificios. Sería hacer poco honor á la resignación y constancia con que esta valerosa guarnición y esforzado vecindario han sufrido tantos males y aflixiones, el detenerse en difusis exhortos para persuadir quanto importa prestarse á lo que dan de si las circunstancias, pues hemos tenido la satisfaccion de experimentar, que son sobradamente zelosos de su gloria y no dexaran de hacer todos los posibles esfuerzos para conservarla y acrescentarla más. Con esta seguridad, de acuerdo de esta junta que presido, debo hacer presente á todos, que al paso que se van acabando los víveres que introduxo el convoy en el día primero del que rige, es con particularidad notable la escasez de harina, que no puede suplirse completamente por los medios ordinarios, por tener de mucho tiempo cortadas los enemigos las aguas de la acequia, que daba curso á nuestros molinos, y por que las tahonas que se habían preparado y demas que se han añadido, con motivo de la inesperada prolongacion del sitio por más de quatro meses, no pueden dar el entero abasto. Siendo preciso pues echar mano de recursos extraordinarios, ya que por especial providencia no falta trigo en el recinto de la plaza, se han adoptado las reglas y medidas siguientes:

"Se destinan los molinillos de los zurradores y curtidores para blanquear trigo, afin de que pueda servir para la olla ó puchero de la tropa de guarnición y para los vecinos en lo que sobrare.

"Se destinan las tahonas del Real y tridentino colegio de San Martin y San Toribio, para moler el trigo y hacer harina para la dicha tropa, y en consecuencia durante esta penuria, no podran los demas vecinos valerse de dichas tahonas empleadas en el expresado destino.

"Quedaran para moler trigo ó hacer harina para los vecinos, no solo las demas tahonas del Peso del carbon, San Francisco de Paula y algunas casas particulares, pagando lo que se ha acostumbrado ó se convenga, sí que tambien todas las piedras ó molinos de chocolate y todos los almirezes grandes de chocolateros, confiteros y demas artesanos que los tengan, y aun los de los boticarios, en las horas que no necesiten para triturar las drogas medicinales ó componer las medicinas; cuyos dueños deberan prestarse ó permitir que qualquier vecino haga moler ó picar en ellos sus trigos con proporcion prudente, á fin de que el beneficio se extienda á todos, ó á los más que se pueda, sobre lo que zelaran los comisionados del Gobierno.

"Se encarga muy particularmente á los vecinos, se esfuercen á moler trigo en sus casas, ya sea con piedras ó almirezes comunes, ó por otros medios que les dicte la industria, y se estimulen á aquellas invenciones y proyectos que con prontitud y facilidad puedan proporcionar tan útiles efectos, asegurándoles, que á los que hicieren alguna máquina ó invencion que pueda contribuir á remediar la urgencia, no solo se les agradecerá el beneficio á favor de la patria, sí que tambien se les protegerá y premiará.

"En consecuencia, ordeno y mando, se guarden cumplan y observen las reglas y prevenciones arriba prescritas, mientras subsistan las actuales apuradas circunstancias, cuya duración no puede ser mucha, prometiéndome que la dispuesta voluntad de la guarnición y vecindario, daran con ello una relevante prueba de la lealtad y heroismo, que hasta aquí dexan bien acreditados.

"Gerona 12 de Septiembre de 1809.-- Mariano Alvarez.-- De acuerdo de la Junta Gubernativa, Francisco Puig y Dorca, vical secretario".


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La Marina. Forçat. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



La Marina. Mariner. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



La Marina. Conjtramestre. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



El general Jean Antoine Verdier (1767-1839). Wikipèdia.


Bibliografia.

Extret de "Reseña histórica de los Sitios de Gerona en 1808 y 1809". Emilio Grahit y Papéll, Imprenta y libreria de Paciano Torres, Gerona. 1894.